Max y Sabrina
se conocen desde los trece años y lo comparten todo. Son como hermanos. Sin
embargo, una tarde en la playa cambia la perspectiva de todo. Max besa a
Sabrina y el mundo de ella se tambalea. Su mejor amigo deja de serlo y se
convierte en un desconocido por el que siente una atracción incontrolable. Pero
Max tiene miedo. No quiere arriesgarse a perderla y prefiere seguir siendo solo
su amigo. Aun así, la pasión acaba arrasando con los miedos.
Un trágico y
repentino suceso hará que sus caminos se separen y se darán cuenta de que quizá
no eran tan imprescindibles el uno para el otro.
Pasan los
años y Max y Sabrina ya no son amigos, ahora son dos extraños que se han
reencontrado. Sus vidas han cambiado, ya no son los mismo, pero hay
sentimientos que jamás desaparecen. Cuando entregas el corazón, nadie te dice
que no te lo devolverán como era antes. Cambiará, para bien o para mal, y
deberás aprender a vivir con ello. ¿Sabrán hacerlo los protagonistas de esta historia?